Por: Eduardo Perez
En este artículo de opinión reflexiono sobre si la pedofilia se nace o se desarrolla, basándome en datos científicos y fuentes reconocidas de salud mental.
¿La pedofilia se nace o se desarrolla? Una reflexión personal
Mi postura ante una pregunta difícil
Siempre que surge la pregunta “¿la pedofilia se nace o se desarrolla?” noto que existe mucha confusión. Por eso decidí expresar mi opinión basándome en lo que dicen las fuentes clínicas más serias.
No es un tema simple, pero sí uno que debe abordarse con responsabilidad.
Lo que dicen las definiciones oficiales
Según los criterios del DSM-5 y de la Organización Mundial de la Salud, la pedofilia se clasifica como un trastorno parafílico, no como una simple enfermedad ni como una condición con la que necesariamente se nace.
Estas definiciones confirman que se trata de una atracción sexual persistente hacia menores prepúberes, acompañada o no de comportamientos.
¿Se nace pedófilo? Mi interpretación de la evidencia
La ciencia aún no ha demostrado que alguien nazca pedófilo.
Sin embargo, algunos estudios que analizan el cerebro y el desarrollo neurológico muestran diferencias en ciertas funciones cognitivas y estructuras cerebrales.
Para mí, esto sugiere que en algunos casos puede existir una base biológica, pero no una determinación absoluta.
Factores psicológicos y sociales que pueden influir
Desde mi punto de vista, los factores del entorno también desempeñan un papel importante.
Experiencias traumáticas, ambientes inestables, negligencia o dificultades afectivas pueden contribuir a este trastorno.
La evidencia señala que es un fenómeno multifactorial, no una condición “de nacimiento”.
Diferencia fundamental entre atracción y delito
Para mí es esencial diferenciar entre pedofilia como atracción patológica y el abuso sexual infantil, que es un delito gravísimo.
Una persona puede tener el trastorno y nunca actuar sobre sus impulsos; mientras que un abusador puede no cumplir criterios clínicos y aun así cometer un crimen.
Por qué debemos hablar del tema con seriedad
Creo firmemente que la sociedad debe entender este fenómeno desde una perspectiva informada.
No para justificar nada, sino para prevenir agresiones, proteger a la infancia y promover tratamientos que reduzcan riesgos.
La ignorancia nunca ayuda. La información sí.
Mi conclusión
En mi opinión, la pedofilia no es algo con lo que se nace de manera comprobada, pero tampoco se reduce a una elección consciente.
Es un trastorno complejo, con posibles componentes biológicos, psicológicos y sociales.
Comprenderlo no significa normalizarlo; significa enfrentarlo mejor para proteger a quienes más lo necesitan: los niños.