La explotación sexual de niños y adolescentes sigue siendo una tragedia mundial. En RD aún persiste. Nuestra lucha desde Fundación RATT Dominicana es firme para erradicarla.
Explotación sexual infantil: una lucha de todos
Una realidad global que no podemos ignorar
La explotación sexual de niños, niñas y adolescentes no es un problema lejano o exclusivo de otras latitudes: es una tragedia mundial que continúa vigente. Según datos de la UNICEF, millones de menores sufren cada año abuso sexual — físico o digital — en diferentes contextos. un.org+1
Esta violencia nos interpela como sociedad, obligándonos a actuar con urgencia, responsabilidad y solidaridad.
Contexto dominicano: avances — pero la sombra persiste
En la República Dominicana, hay señales de progreso. Un estudio de la International Justice Mission (IJM) muestra que la prevalencia de explotación sexual comercial infantil descendió del 10 % en 2014 a 2.2 % en 2022. ijm.org+2Presidencia de la República Dominicana+2
Este descenso, aunque alentador, no significa que el problema haya desaparecido. 1 de cada 45 personas involucradas en comercio sexual sigue siendo menor de edad. ijm.org+1
Además, los factores de riesgo — pobreza, desigualdad, turismo, marginación — siguen presentes en muchas comunidades. UNICEF+2Acento+2
¿Por qué sigue ocurriendo? Las causas estructurales
Detrás de cada víctima hay un entramado complejo: vulnerabilidad económica, falta de oportunidades, deficiencias en protección social, zonas turísticas con alta demanda, redes de trata, y muchas veces impunidad. UNICEF+2ijm.org+2
También existe un problema cultural: el silencio, la estigmatización, el miedo a denunciar, la normalización de la explotación. Cuando callamos, permitimos que esta violencia se perpetúe. Como ha dicho un medio local: “Quien conoce o sospecha del abuso y no actúa es también responsable”. Periódico elCaribe
Nuestro compromiso: la voz de Fundación RATT Dominicana
Desde Fundación RATT Dominicana levantamos la voz contra este horror. Creemos firmemente que ningún niño — ninguna niña — debe vivir con miedo, explotación o abuso.
- Trabajamos en sensibilización: comunidades, familias, escuelas, líderes locales. Es fundamental educar para prevenir, visibilizar y denunciar.
- Promovemos alianzas: con instituciones como UNICEF, autoridades, sectores turísticos, iglesias, sociedad civil. Solo unidos lograremos un entorno protector.
- Acompañamos víctimas: apoyo psicológico, legal, social; porque sanar también implica recuperar la dignidad, la esperanza y el derecho a una infancia libre.
¿Y tú qué puedes hacer? La responsabilidad es de todos
No basta con estadísticas ni declaraciones. Cada ciudadano tiene un rol. Si sabes o sospechas de un caso: denuncia. Si puedes apoyar organizaciones, hazlo. Si puedes educar, informa. Si puedes proteger, actúa.
Callar no es opción. La explotación sexual infantil es una forma de violencia, esclavitud moderna, una deuda con nuestra humanidad. Como dijo un referente de UNICEF: este crimen deja cicatrices profundas y reduce las esperanzas de una vida digna. Periódico elCaribe+1